Han pasado 796 años desde que, en 1219, el rey Sancho VII el Fuerte
colocase la primera piedra de esta localidad amurallada, en el portal de San Felices.
Desde entonces, cada 1 de febrero,
la tradición marca que un tamborilero recoja a los niños en este mismo portal
y los acompañe hasta la iglesia, donde se les entrega una moneda.
Este año, la nieve hizo que la comitiva de críos que seguía al tambor de Toño Galar
no fuese de más de una docena de niños.
El resto, esperaba pacientemente en los portales del ayuntamiento,
resguardados de los copos y del frío.
Cada uno de los niños portaba su tambor y esperó pacientemente la fila
para recoger el regalo que entregaba el Consistorio,
más de 600 lotes de calculadoras, pinturas y vasos-termo para todos los asistentes.
Los regalos no terminaron ahí [...] los niños volvieron a hacer una fila
para recoger la moneda de un euro que se les repartió,
de nuevo bajo un manto de copos de nieve.
El Consistorio vianés entregó un total de 1.300 monedas [...]
El Consistorio vianés entregó un total de 1.300 monedas [...]
El destino de la mayoría de los euros estaba claro, comprar chucherías.
Así lo manifestaban los hermanos Alan y Jordan Díaz de Cerio Alcoz,
de 8 y 4 años respectivamente, y que habían acudido con su tambor,
acompañados de Alberto, su padre.
“Yo estaba un poco nervioso porque es un día que me gusta mucho”, comentó Alan.
“Nos ha apretujado un poco, pero al final, hemos cogido nuestra moneda”, añadió Jordan.
Ambos se disponían a ir directamente a la tienda de chuchería [....]
De otra opinión era Jon Izurza Ruiz, de 8 años, que tenía claro el destino de su euro.
“Yo lo voy a meter a la hucha, porque quiero ahorrar para comprarme una casa” [...]
La jornada acabó con hinchables para los niños, que se colocaron, a resguardo,
en la antigua iglesia de San Francisco y con un espectáculo de humor
para los padres y demás adultos".
"www.noticiasdenavarra.com"
1-2-2015
(resumen)
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